Ubuntu 16.04 con el nuevo parche de Meltdown no inicia

En otros de nuestros artículos explicábamos cómo y por qué el fallo de Intel afectaba a las versiones del kernel y que Linux estaba trabajando con todas sus energías en una solución.

Pues bien, no sólo compañías como Microsoft está teniendo problemas con las soluciones con prisas para solventar este inconveniente con los procesadores Intel, ya que parece ser que en el nuevo parche que Ubuntu incluyó para su solución contra el famoso Meltdown está dando más complicaciones de lo que sus desarrolladores esperaban.

Según un fallo recientemente reportado, confirmado y catalogado por sus propios desarrolladores como algo de importancia crítica, son muchos los usuarios de Ubuntu 16.04 lo que han tenido problemas actualizando a la nueva versión del kernel en su versión 4.4.0-108-generic ya que tras su instalación, el sistema no es capaz de iniciar correctamente.

Tras confirmarse este fallo los desarrolladores de Ubuntu se han pusieron manos a la obra para solventar este problema lo antes posible y esto desembocó en un nuevo parche del kernel en us versión 4.4.0-109-generic. Parece ser que si se posee ésta no hay ningún problema en nuevas instalaciones o actualizaciones, iniciándose sin problema alguno además de estar completamente seguros con el nuevo parche contra Meltdown. 

No obstante, si has sido de los desafortunados en encontrarte con la actualización a 4.4.0-108-generic y tu flamante Ubuntu recién actualizado no arranca, no entres en pánico tiene solución. Con estos cuatro pasos podrás iniciar y actualizar a la nueva versión 4.4.0-109-generic para que no vuelva a pasarte. 

1- Iniciamos grub desde la consola (presionando la tecla Esc nada más iniciar tu ordenador y que veas la pantalla de información de tu Bios desaparecer).

2- Inicias sesión normalmente. 

3- Realizaremos una actualización como haríamos habitualmente de todo el sistema operativo, eso si, hay que asegurase de que el kernel que se instalará es la versión 4.4.0-109-generic o superior. 

4- Cuando termine de instalar todas las actualizaciones, simplemente reiniciamos el sistema de forma normal y … ¡voilà! volveremos a tener nuestro Ubuntu sin problemas y protegido.

Puede parecer un gran problema para usuarios noveles, pero podría haber sido mucho peor, gracias a la eficacia del equipo de desarrollo, tenemos una solución no muy compleja.

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